Los 9 motivos por los que tengo bitcoins

No os voy a molestar con porquerías y demás habladurías, por que seguro que vuestro tiempo vale tanto como el mío y no podéis entreteneros prolegómenos y o u epílogos. ¿Quien puede permitirse no tomar una buena taza de buen café en buena compañía en una buena tarde como hoy? Mi intención es que si tuvierais un examen, pudierais imprimir cómodamente esta entrada y tener a mano en vuestro estuche las 9 razones por las que yo me he hecho con unos bitcoins. Ea!

1. Es mi apuesta contra el sistema actual de banco central, en que unos señores que no conozco de nada toman las decisiones que determinan como se comporta el dinero que representa la riqueza de todos.
2. Creo más en un algoritmo matemático que en ningún regulador leyendo un discurso bianual.
3. Puedo saber en cada momento qué cantidad de dinero hay en circulación, algo que llevo años intentando averiguar sin éxito en relación a los euros, dólares y libras.
4. Puedo saber quién mueve cuánto dinero y dónde va a parar, entre otros datos públicamente disponibles, siendo la moneda más transparente con que he topado.
5. Nadie me puede amenazar con hacerme un corralito.
6. Su valor no está respaldado por el petróleo, la deuda de los ciudadanos, un orden social impuesto o por otros mecanismos denigrantes, si no por su valor en un mercado en verdadera competencia.
7. Es potencialmente muy beneficioso para mi economía personal, pues, como todo proyecto incipiente con el que uno se compromete, puede devolver multiplicado lo que en el comienzo se aportó.
8. Sobre internet, la imagino como E.E.U.U. al borde de la guerra contra una autoridad que asfixiaba su necesidad de prosperar y desarrollar una nueva forma de hacer las cosas. Tal confinamiento llevó a la guerra contra el Imperio Británico. Si lo que ocurre entre internet y los estados dominantes no es una guerra entre los que tienen todo por ganar y los que tienen todo por perder, que me digan qué es todo esto. Bitcoin será el dólar de la nueva tierra de las oportunidades y la libertad: La Red.
9. Los dos mecanismos de concentración de riqueza más importantes, devaluar tu dinero mediante la inflación y obligarte a devolver el mismo dinero que alguien crea de la nada más los intereses, no son posibles.

Si querés llevaros esto al examen, imprimid solo hasta la línea anterior.

No es mi intención estropear la el café de nadie como contaba al principio, pero si queréis saciar vuestras ansias de saber, podéis aprovecharos de lo que yo he podido divagar durante los intermedios de Gandía Shore.

Resulta que esto del BTC (BiTCoin), pues es una movida muy chunga. No os voy a contar la película del Satoshi Nakamoto, que lo pone en todos lados, ni lo de que en Silk Road pasaban porros. Para eso leéis El País. La cosa es que bitcoin es dinero porque sirve como depositante de riqueza y es susceptible de intercambio. Zósimo puede cambiar lechugas por filetes, pero si le sobran lechugas hoy y no quiere filetes esta semana, pues anota en un papel que Zósimo ha dado tantas lechugas y, cuando le apetezca un filetito, pues va a ver a Ambrosio y lleva el papel. Claro, si Ambrosio tuviera que meter en la cabeza todas las cuentas de toda la comarca, pues el final alguien le iba a chulear. Por eso, llevan en la fachada del ayuntamiento, en la Calle Carretera General, un papel donde se anotan todas estas cuentas, por que es mejor. Ya sabéis que entre vecinos no hay lugar para imprecisiones en este aspecto: la gente suele tener escopeta o te pueden meter el tractor por tu sembrao.

Eso es bitcoin, una contabilidad compartida de las transacciones; pero si eres redactor tienes que justificar el sueldo y contar una historia de que esto es “una cryptocurrency [el BitCoin] experimental basada en cuting-edge's que nunca antes se ha probado y que se obtiene mediante un proceso de minería especial que requiere unos equipos de elevadísimas potencias de cálculo...” (Pirate JackerMagacine). O algo así.

Efectivamente, si se parte de un momento en que hay ningún bitcoin y se pretende llegar a un segundo momento en que haya unos bitcoins, entre medias hay que hacerlos aparecer. Al proceso de crear los bitcoins que circulan por esa contabilidad compartida, se le llama minería, en referencia a la obtención del oro, que hasta 1971 era el limitantede la cantidad de dinero en circulación. Como el oro, a medida que se pone en circulación, es más difícil extraerlo de la tierra y llega un momento en que prácticamente se agota, entonces hay que herniarse para sacar unas migajas. Bitcoin presenta esa característica de no ilimitado, como el oro y en contraposición al dólar o el euro, los cuales uno el banco central puede imprimir a su voluntad sin preguntar a la gente que participa en ese sistema.

Si queréis bitcoins, pues os hacéis una cartera, o wallet, en uno de los muchos sitios que hay. No perdáis la contraseña, igual que no te dejas las llaves de casa por ahí. Luego os quejáis de que no podéis entrar... Y si queréis meter dinero, pues os registráis en un sitio de intercambio (os van a pedir identificación y prueba de residencia) y metéis euros o lo que sea, que alli los podéis cambiar a bitcoins y transferirlos a vuestra cartera digital. Y ya está.

Para los que suelen decir cosas del estilo de: “ya pero si solo yo los tengo, ¿para qué me sirve?” Siendo una legítima y nada trivial observación, con el tiempo he descubierto la flaqueza de esa poderisísima arma retórica: “Hubo un tipo que fue el primero en tener teléfono, por supuesto, no le llamaba mucha gente por entonces... No mucho tiempo después, el que no tenía teléfono no podía ni buscar empleo”. Lo mismo es para los aparatos eléctricos, el email, los coches y las gasolineras... y todo, en definitiva, que muestre una estructura en forma de red. Un día eres un tipo que vive en el futuro, y poco después te esfuerzas por demostrar que tú llegaste antes que el abarrotado rebaño.

Para los que queráis saber en qué punto de desarrollo está actualmente el mercado y a dónde va a llegar, y cuándo lo hará, no me preguntéis que no lo sé. Sin embargo, os muestro gratis mis suposiciones para que las consideréis si os gustan.

Ésta es la forma de una función arcotangente. Yeah! La muestro porque refleja la evolución que muestran frecuentemente las transiciones de estado en los sistemas dinámicos, cuando existen lazos de retroalimentación positivos y negativos. Yo creo que la evolución de bitcoin es un proceso de ese tipo: el sistema económico es suficientemente complejo, existen lazos de retroalimentación positivos (la fortaleza de esta moneda induciría debilidad el las restantes promoviendo una mayor revalorización de bitcoin, o la introducción de agentes con gran volumen como ebay o paypal podría ampliar la cantidad de consumidores, atrayendo con ello más vendedores...) y negativos (una gran revalorización disminuye la tendencia a gastar, con lo que el atractivo de comerciar en bitcoins se ve reducido).

Existen multitud de posibilidades, pero lo que quiero señalar es que hay situaciones de equilibrio y estados transitorios, éstos, más repentinos de lo que se tiende a esperar, y que tienen lugar cuando uno de los lazos de retroactividad domina. Por eso, si resulta que existe un lugar estable para bitcoin en el mercado, pienso que lo alcanzará de un modo brusco.

Si queréis meto una gráfica con fluctuaciones en el valor

Si no queríais ya no la voy a quitar.

Y otra con un picuruto en lo alto.

A veces estas subidas cogen un poco de inercia y se pasan unos metros de frenada, entonces se deprecian, incentivando las ventas hasta encontrar un punto de equilibrio.

¿Cuándo?
Yo que sé, pero una esa transición podría durar pocos años, por decir una cifra concreta.

¿Cuánto?
Yo que sé, pero puede ser mucho, seguro que yo digo una cifra mayor de lo que esperas: 

 

3 380 952,38 USD/BTC.

más de tres millones de dolares por bitcoin

Voy a ser muy conservador en los cálculos, pero los números aquí son muy gordos.

¿Me he pasado? Pues estoy siendo conservador. Estoy considerando la cantidad de dólares correspondientes a un solo año, porque nadie me es capaz a facilitar el dato de cuántos dólares, euros, libras y demás monedas han puesto en circulación durante los últimos siglos. Como sobran cifras para impresionar al lector, se puede incluso considerar que el mercado de BTC alcanza solo el 1% del mercado mundial. Aún así, resultaría una relación de 33 809.52 USD/BTC.

Ahí queda ese número.

De lo que no nos enteramos mucho es de que la moneda que utilizamos cada día, la moneda en que cobramos los meses en que hay suerte, vale una miseria y que en un mundo con 7000000000 habitantes, quien no acaba el año con 10000 dolares más que el anterior, está por debajo de la media. ¿Te pasa a ti?

Si quieres especular y te van las emociones fuertes, ahí tienes algo que puede multiplicar en un periodo no muy largo su valor actual por mil, por diez mil... Y da por hecho, no que muchos grandes y pequeños lo harán, si no que ya lo están haciendo. Lo más curioso de todo es que, la mejor opción para las grandes fortunas, sea no entrar tarde en un nuevo mundo donde sus dos principales mecanismos de dominio no son posibles: devaluar tu dinero mediante la inflación y obligarte a devolverles el mismo dinero que crean de la nada más los intereses.